"Es terrible, dentro de mi, estoy gritando como un animal acorralado. Pero nadie me hace caso.
Si tuviera brazos, podría matarme.
Si tuviera piernas podría correr.
Si tuviera voz, podría hablar, y mi voz me haría compañía. Podría pedir ayuda. Pero no puedo hacer nada, nada, nadie oye mis gritos, y sin embargo tengo que hacer algo por que no sé, no sé cómo podré seguir viviendo así."
Esta es una de las terribles reflexiones de un joven combatiente de la 1 ª Guerra Mundial que se encuentra en un hospital tras ser herido por una bomba, debido a que no puede hablar, escuchar ni ver, también tiene los brazos y las piernas amputados. A través de los recuerdos entre el pasado y el presente del protagonista, el espectador se va enterando de la vida anterior al accidente y de la recuperación de la conciencia del protagonista, así como sus esfuerzos para recuperar el sentido de la vida y la posibilidad de comunicación en su estado.
Impactante la primera imagen de los médicos:
Dramática, desasosegante e interesante película, que desde el punto de vista de la bioética nos invita a reflexionar sobre:
- Adaptación a los cambios; proceso de duelo
- Discapacidad y autonomía
- Religión y salud
- Investigación
- Relaciones interpersonales; comunicación
- Sistema sanitario
- Profesionalismo
- Derechos humanos y eutanasia; principios bioéticos
- Rol de la enfermería; autonomía enfermera
Gracias , interesante novela. Voy a conseguirla para poder leerla este verano. En cuanto a la película, la vi hace años, ya no recuerdo casi nada de ella, estaría muy bien para después del verano.
ResponderEliminarYo, en estos momentos estoy leyendo el libro de Adela Cortina: ¿Para que sirve realmente la ética? también lo recomiendo, aunque me imagino que los que lleváis tiempo ya lo conocereis.
Un abrazo y feliz verano